En Talavera de la Reina, la literatura se está abriendo camino desde las bibliotecas hacia nuevos horizontes narrativos. El primer Taller de Relatos de la Biblioteca José Hierro ha demostrado que el talento literario no solo se cultiva en grandes editoriales, sino también en espacios cercanos, comunitarios y profundamente humanos.
Lo que comenzó como una experiencia piloto de escritura creativa, organizada desde la biblioteca con un enfoque práctico y accesible, ha dado lugar a un grupo cohesionado y creativo que ha demostrado tener mucho que decir. La propuesta formativa, dirigida por José María Benítez, ha servido como punto de partida para muchas autoras que, por primera vez, se atrevieron a compartir públicamente sus relatos de ficción.
Lo más valioso de este proyecto no es sólo el resultado, sino también el proceso de formación, motivación y acompañamiento que hay detrás. En un entorno donde muchas veces escribir se percibe como un acto solitario, este taller ha demostrado que escribir también puede ser un ejercicio compartido, lúdico y transformador.
Los relatos que conforman esta primera publicación son diversos en estilo, género y tono, pero todos comparten una misma energía: la autenticidad. No se trata de ejercicios de escritura, sino de textos vivos, potentes, que revelan una mirada del mundo, una experiencia emocional o una historia que merece ser contada.
Compartimos a continuación los relatos, junto a una breve sinopsis de cada uno y enlaces para acceder a ellos individualmente.
El abuelo se acababa de levantar – Mercedes García Cano
Un relato íntimo, tierno y lleno de matices sensoriales que nos transporta a la cocina familiar, ese espacio donde los afectos se hacen memoria. Una historia de raíces, aromas y pequeños gestos que sostienen generaciones.
Malas hierbas – M.ª Dolores Martín Pulido
Una obsesión cotidiana se convierte en símbolo de vacío emocional. Esta historia nos confronta con la delgada línea entre lo que es manía, lo que es necesidad… y lo que es una forma desesperada de controlar el mundo.
El viaducto – María Juana Fernández Carrasco
Suspenso, tensión y una introspección aguda marcan este relato que juega con el límite entre la vida y la muerte. Una narración onírica con un giro inesperado que deja al lector entre el abismo… y el alivio.
El encargo – Elena Vera de Castro
Una historia valiente, cruda y emocionalmente intensa sobre el dilema ético de un padre desesperado. Un texto que explora el límite entre el amor incondicional y la condena moral.
El buen vecino – Pilar Ibáñez Plaza
Con humor negro e inteligencia narrativa, esta historia nos presenta a un exconvicto que intenta vivir en paz… pero no olvida cómo vengarse. Una delicia oscura que mezcla ironía, justicia poética y memoria.
La quebrada que se secó con el olvido – Olga Lucía Vélez Montoya
Un homenaje conmovedor a las mujeres del campo que han sostenido la vida en medio de la escasez. Con una voz poética, la autora transforma la sequía en símbolo de abandono institucional y fortaleza silenciosa.
Mi padre y yo – María José Sánchez Díaz
Un relato nostálgico y delicado que se mueve entre el arte, el cariño filial y un secreto. La figura del padre, ladrón de cuadros y maestro de sensibilidad, se queda grabada como un personaje inolvidable.
Una iniciativa que siembra comunidad
Desde fuera, lo que más sorprende es la calidad emocional y literaria de los textos, pero también la implicación con la que se han abordado temas tan diversos como la maternidad, la memoria, la venganza, la enfermedad o el abandono rural. Todos ellos tratados con profundidad y sensibilidad.
El Taller de Relatos de la Biblioteca José Hierro ha sido, sin duda, una apuesta por la cultura que construye vínculos, rompe silencios y ofrece una plataforma real para nuevas voces.
Esperamos que esta primera edición sea solo el inicio de muchas más. Porque en tiempos de ruido, leer y escribir sigue siendo un acto de resistencia. Y porque estas autoras, con sus relatos, han dejado huella.