El barrio de La Solana tiene su origen el 18 de junio de 1971, cuando se ofreció la urbanización de la zona al final de la Avenida de Pio XII para construir un polígono. Primeramente, el Ayuntamiento se negó, debido a las deficiencias que presentaban tanto el proyecto como la ubicación. El 15 de febrero de 1974 el Ministerio de la Vivienda reiteró el ofrecimiento al Ayuntamiento, que volvió a desistir por los problemas que planteaba la zona en cuanto a luz, pavimentación y zonas verdes. Tras varias inspecciones más, en diciembre de 1976 se aprobó el presupuesto, que ascendía a la cantidad de 2.449.198 pesetas. Con esto se permitía acondicionar la zona y así poder hacer el barrio más bonito de Talavera.
Pero pronto esto comenzó a incumplirse y la ordenación que prohibía levantar edificios de más de cuatro plantas se vio anulada con la construcción de antiestéticos bloques columna. Además, se levantaron también rascacielos de fea estética, hasta el punto que, Talavera figuró durante algunos años como ejemplo de ciudad mal urbanizada. Sin embargo, desde los años ochenta, se convirtió el barrio en un lugar de ocio con bares y locales de copas, así como con la piscina La Solana (ya desaparecida) y el Complejo Anasol. Actualmente La Solana es un barrio alegre, y sigue lleno de lugares para el ocio, como bares y restaurantes que merece la pena frecuentar.