Este mes nuestro amigo Toni Jerónimo nos trae este detalle que plasma en el tiempo la friolera de 55 años como si de 1 o 2 se tratase.
En la primera imagen podemos visualizar una postal de 1959, hoy, 55 años después podríamos decir que es uno de los lugares de nuestra ciudad que menos alterado se ha visto. Una parte de nuestros Jardines del Prado cuya visita se ha hecho indispensable en las tardes de paseo para grandes y pequeños.
Sus inquilinos, los bonitos e inocentes patitos son un bien que todos los vecinos debemos cuidar y respetar con cariño. El amor hacia los animales es un ejemplo de la actitud de grandes personas, de nuestra civilización y nuestra educación. Recuérdalo y disfruta de la libertad que transmiten sus vuelos y nados. Si les ves en apuros no dudes en ayudarles de inmediato y denunciarlo. Hagámoslo un deber de todos los vecinos y ciudadanos.
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