En Talleres Pedro Madroño recopilan una lista de posibles averías
El refrán que dice que las prisas no son buenas también vale para el mantenimiento del automóvil. Pero no solo las prisas sino también una conducción agresiva o brusca pueden hacer que tengamos que visitar el taller más de lo recomendable por posibles averías. El mejor consejo es ir siempre a hacer las revisiones correspondientes a tu vehículo en un sitio de confianza como Talleres Pedro Madroño.
¿Qué averías podemos provocar?
- En la caja de cambios tanto manual como automática. Para que funcione correctamente no es aconsejable realizar salidas bruscas; siempre hay que buscar una aceleración paulatina y tranquila para no forzarla. En el caso de los cambios automáticos es recomendable pasar la palanca de D a N cuando el coche está al ralentí, por ejemplo en los semáforos, para conseguir refrigerar el aceite hidráulico del cambio.
- Otra mala costumbre es tener la mano en la palanca de cambios. Este gesto, además de poner en riesgo la seguridad en el coche, perjudica la estructura, pues el rozamiento y la presión constante pueden conllevar la aparición de deformaciones en el engranaje.
- En el bloque de motor. Para los conductores bruscos, la mejor recomendación es que hay que evitar a toda costa las aceleraciones con el motor en frío. Los daños en el bloque del motor suelen producirse por no realizar los cambios de aceite y de refrigerante que especifica el fabricante.
- En el cigüeñal. Un conductor impaciente puede caer en el error de arrancar varias veces seguidas el motor para que se apague un testigo o se solucione un problema, pero se consigue justo el efecto contrario.
- En el embrague. Aunque tener una reacción rápida con el coche es de vital importancia no implica llevar todo el rato el pie en el embrague. Este gesto tan común es muy dañino para el funcionamiento del vehículo, ya que las fricciones que se producen en la parte interna del disco de embrague acabarán en rotura.
- En el diferencial. Giros rápidos, aceleraciones repentinas y, en general, cualquier movimiento brusco contribuirá a que el diferencial pueda dar fallos. El diferencial es el elemento encargado de regular la velocidad de giro de las ruedas para que puedan adoptar velocidades diferentes cuando la dirección del coche gira tanto a izquierda como a derecha.
- En los discos de pastillas y frenos. Si conduces de forma agresiva están expuestos a sobrecalentamiento, lo que puede producir un descenso de eficacia en la frenada y además supondrá que el desgaste de estos elementos se acelere. Además, frenar demasiado o de manera brusca puede provocar un desgaste irregular de estos elementos, provocando vibraciones en el volante y deterioro del líquido de frenos.
- En el turbo. Malos hábitos al volante pueden provocar un deterioro rápido y su consecuente sustitución. Dejar calentar el coche al ralentí durante 30 segundos antes de emprender la marcha, no pisar demasiado el acelerador, no realizar maniobras bruscas hasta que el coche haya alcanzado su temperatura ideal aconsejada por el fabricante y dejar enfriar el coche durante unos segundos al ralentí antes de apagar.
En Talleres Pedro Madroño cuidan de tu coche revisando su estado y cuidando cada detalle de su mantenimiento. Solicita cita previa en su página web y deja que sus profesionales revisen el estado de tu automóvil. También puedes contactar con ellos a través del teléfono 925 80 23 71