Le pregunte a mi paciente ¿que profesión tienes?, y me contesto sin dilación “ex trabajador de la construcción”. Lo dijo con tanta pesadumbre como firmeza, sentía que nunca volvería a esta actividad, no tanto porque no le gustara, sino porque tenia asumido que su profesión ya no podría ejercerla debido a la crisis del sector.
Estar en paro es una desgracia, pensar que tu profesión no tiene futuro puede llegar a ser devastador para la autoestima y para la salud psicosocial de quien lo padece. Son muchos los talaveranos que se encuentran en esta situación, y es con este artículo como pretendo poder activar una esperanza realista que te ayude a encarar con fortaleza tu futuro, para ello debes tener en cuenta que:
1 La esperanza nunca debe convertirnos en ilusos. El toxico más demoledor para salir de una crisis es plantearse soluciones imposibles, ya que la esperanza sin un proyecto firme suele terminar en desesperanza. Para ello es importante que tus soluciones ante una crisis no se realicen desde pensamientos que comiencen por “debería…”, “tendría que…” o “me gustaría que…”. Las decisiones tienen que estar instaladas en plataformas de decisión que se ciñan a lo que ocurre, a lo que sucede.
2. Es fundamental que la solución dependa sobre todo de ti, el porcentaje mayor de la actividad para encontrar una solución debe ser consecuencia de aquello que tú puedas y sepas ya hacer. Aquellas personas que colocan su meta en aquello que depende de otros, tal como un una comunidad autónoma o un ayuntamiento tienen menos oportunidades de poder conseguir llegar a su meta.
3. Tienes que diferenciarte aunque creas que haces lo mismo que los demás, tienes que ser distint@, original, peculiar, singular. Todas las personas que han salido de una crisis lo han conseguido porque han sido ellos mismos y se han sentido únicos, han sabido colocar aquello que les diferencia en su proyecto. Colocar tu personalidad en el proyecto es definitivo.
4. Desarrolla un plan y sobre todo termínalo, no estés eternamente en la planificación, llévalo a la práctica, no olvides que solo puedes realizar aquello que ya has imaginado haber realizado, pero solo se realiza: haciéndolo.
5. Se flexible, no tengas solo derechos, aprende a perder para ganar (eso si pierde, por que sabes que perdiendo, ganas) y coloca como fundamento de tu empresa hacer aquello que puedes y sabes hacer. Coloca la meta en tu esfuerzo y tu perseverancia, con ello serás imparable.
Y para que no parezca que todo esto son palabras os propongo un plan:
• Ten en cuenta el nuevo escenario de la construcción donde las reformas de viviendas es un aval de futuro.
• Las reformas deben ser rápidas, con calidad y entrega en plazo.
• Diferenciar el servicio a personas mayores, singles, recién casados, amigos que viven juntos, familia tradicional, comunidades de vecinos etc.
• Empleando nuevas tecnologías con una imagen de confianza, calidad, servicio de limpieza, gestión de permisos, licencias y seguros de obra.
• Con escasos gastos de infraestructura, sin stop de almacenaje, como en las buenas carnicerías: solo se compra lo que se vende.
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