Unos labios gruesos y carnosos pueden mejorar totalmente tu apariencia diaria o en todo caso, deslumbrar en alguna ocasión especial. Para lograrlo debes tomar en cuenta algunas claves.
Elige un labial con acabado brillante: La luz rebota y crea la ilusión de labios más voluminosos. Evita los tonos oscuros, ya que afinarían tus labios.
Aplica corrector: Crea un efecto visual donde tus labios luzcan voluptuosos. Aplica una capa ligera. Elige un tono adecuado que sea similar al tono de tu base de maquillaje.
Estimula la circulación: Es otra forma de hacerlos lucir más gruesos. Una manera de lograrlo es usando un exfoliante para labios antes de aplicar cualquier labial.
Delinea tus labios: Combínalo con tu tono de labial y así podrás obtener unos labios más gruesos y definidos. Si usas un tono de delineador más oscuro que el tono del labial, difuminalo hasta llegar a unir ambos tonos. El truco que usamos los maquilladores profesionales para lograr unos labios carnosos, es aplicar sombra blanca o corrector en el centro del labio superior e inferior y así tendrás un volumen deseado y totalmente impactante.