La casa-palacio de la familia de la Llave está situada en la calle del Sol, frente a la Delegación de Hacienda y haciendo esquina a ésta. Hace algunos años fue declarada Bien de Interés Cultural y es uno de los pocos edificios palaciegos que aún se mantienen en pie, casi abandonados, muestras de un pasado esplendor hace tiempo desaparecido en nuestra ciudad. Esta casa perteneció a la familia Jiménez de la Llave, entre cuyos miembros destacó el historiador talaverano Luis Jiménez, el cual da nombre a una de las calles de talavera.
La fachada da a la calle del Sol y posee arco rebajado y adovelado, flanqueado por columnas jónicas laterales, que descansan sobre prominentes modillones, cornisa y entablamento que se interrumpe por la presencia del balcón, a cuyos lados se ven escudos nobiliarios. Los huecos están recercados, dotados de rejería, sobre todo en la ventana situada sobre la puerta trasera. Las ventanas poseen alfices decorados a modo de rosetas. El alero es de madera y la cubierta a cuatro aguas. En el hueco superior hay un mirador de época posterior al resto del edificio. Este espléndido palacio está datado en los siglos XVII-XVIII, y en él estuvo el colegio de las Misioneras de la Providencia. Hace poco tiempo que fue parcialmente restaurado.