El Grupo Municipal de VOX en el Ayuntamiento de Pepino ha anunciado su apoyo a la moción de censura registrada por los tres concejales no adscritos contra el actual alcalde, Inocencio Gil Resino. La decisión, comunicada el 7 de octubre de 2025 por el portavoz de VOX, Servando Chico Zarapuz, y la concejala María José Pardo, se enmarca —según explican— en un diagnóstico de falta de transparencia, incremento de la presión fiscal, presuntas irregularidades administrativas y una mala distribución de los recursos públicos. El partido subraya que se trata de un paso «delicado» pero «necesario» para recuperar la confianza de los vecinos y reorientar la gestión municipal hacia estándares de responsabilidad y eficacia.
Desde el inicio de la legislatura, VOX asegura haber ejercido una oposición «firme, constructiva y respetuosa», reclamando explicaciones sobre distintos aspectos de la gestión. En ese marco sitúan sus advertencias sobre gastos superfluos sin justificación, la escasa inversión en urbanizaciones y polígonos, y lo que consideran una desproporción entre partidas dedicadas a festejos frente a servicios esenciales como transporte, agua potable o recogida de residuos en todo el término municipal. Como síntesis de esa línea crítica, los concejales recuerdan:
Hemos denunciado la falta de transparencia en la adjudicación de contratos, la elevada presión fiscal que soportan los vecinos y la falta de ayudas a las familias. Servando Chico y María José Pardo (VOX Pepino)
Transparencia, acceso a la información y confianza pública
Uno de los ejes que VOX coloca en el centro del debate es el acceso a la información económico-financiera del Ayuntamiento. Según su versión, las reiteradas solicitudes de consulta a la contabilidad municipal no han recibido respuesta, lo que habría deteriorado la relación institucional y, sobre todo, la confianza pública en la administración local. De ahí que refuercen su postura con un mensaje claro:
Esta situación de opacidad y desconfianza confirma la necesidad de un cambio urgente en la forma de gobernar Pepino.Servando Chico y María José Pardo (VOX Pepino)
En este mismo bloque sitúan las «presuntas irregularidades administrativas y económicas», incluyendo la mención a una «presunta falsificación de documento público». VOX insiste en que los hechos deberán, en su caso, esclarecerse por las vías oportunas, pero sostiene que el Ayuntamiento debe operar bajo un principio de transparencia plena, con rendición de cuentas regular y documentación accesible para la oposición, como garantía mínima de control democrático.
Una moción de censura en Pepino sin pactos con el PSOE
El anuncio del apoyo a la moción ha ido acompañado de una precisión política relevante: VOX niega cualquier acuerdo con el PSOE. Recuerda que la iniciativa ha sido presentada por los concejales no adscritos y que son ellos quienes proponen al candidato a la Alcaldía. En palabras del grupo municipal:
Esta fórmula evita cualquier implicación o pacto con el PSOE. Los no adscritos actúan como nexo de unión, sin comprometer a ninguna de las partes, lo que permite a cada grupo político seguir adelante con su propio programa. Servando Chico y María José Pardo (VOX Pepino)
Con esta aclaración, VOX busca despejar dudas sobre eventuales alianzas y, al mismo tiempo, reivindicar la coherencia de su proyecto local. En su crítica al actual Ejecutivo, remarcan que el objetivo no es la rotación de siglas, sino «recuperar la confianza» de los vecinos a través de un modelo de gestión «basado en la transparencia, la responsabilidad y el gobierno eficaz al servicio» del municipio.
Prioridades de gasto: de los festejos a los servicios básicos
Otro de los argumentos que vertebran la posición de VOX se centra en las prioridades presupuestarias. El grupo critica el peso de los gastos festivos y de protocolo frente a la financiación de servicios básicos. Sostienen que el equilibrio debe inclinarse hacia la mejora de la red de transporte, el suministro de agua potable y la recogida de residuos, especialmente en urbanizaciones y zonas industriales que, afirman, requieren más inversión para garantizar su adecuado funcionamiento. En esa línea, insisten:
Esta decisión responde a la petición de muchos vecinos que nos han instado a actuar para poner fin a una situación insostenible. VOX Pepino considera que los recursos públicos deben destinarse a mejorar los servicios básicos, no a mantener estructuras políticas innecesarias ni gastos superfluos. Servando Chico y María José Pardo (VOX Pepino)
Compromisos incumplidos: el caso del Plan Astra
En el balance que ofrece VOX sobre el mandato, figura el señalamiento de compromisos electorales presuntamente incumplidos por el actual alcalde. Destacan, entre ellos, la puesta en marcha del convenio del servicio de autobuses entre Pepino, sus urbanizaciones y Talavera, incluido —recuerdan— en el Plan Astra. Sobre este punto apelan a un pronunciamiento en pleno:
En el Pleno Ordinario de junio, el alcalde reconoció que no existía ningún acuerdo firmado con la Junta de Castilla-La Mancha, pese a haberlo anunciado públicamente, lo que demuestra que mintió a los vecinos. Servando Chico y María José Pardo (VOX Pepino)
Para VOX, el transporte público es una política palanca: mejora la movilidad, vertebra el municipio y favorece la actividad económica, y por ello exigen certezas administrativas y presupuestarias.
Una «nueva etapa» y un compromiso político explícito
El apoyo a la moción se presenta, desde la óptica de VOX, como el inicio de una «nueva etapa» política local. Conscientes del momento institucional, reiteran su promesa de orientar la acción municipal hacia resultados medibles en servicios básicos, equilibrio presupuestario y acceso a la información. Lo resumen en una declaración programática:
VOX Pepino mantiene su compromiso con una gestión municipal basada en el sentido común, la responsabilidad y la defensa de los intereses reales de los vecinos. Esta decisión se toma con la firme voluntad de impulsar un cambio positivo para el municipio. Servando Chico y María José Pardo (VOX Pepino)
En esa hoja de ruta, subrayan que cada grupo deberá sostener su propio programa y rendir cuentas ante los vecinos, sin atajos ni bloques monolíticos. De fondo, reivindican una administración más previsible y auditada, con contratos publicitados y fiscalizados, y un presupuesto que priorice lo esencial.
Moción de censura en Pepino: Un debate para toda la corporación
La moción de censura abre un proceso institucional que, más allá de los números, interpelará a la corporación sobre el modelo de gobernanza, la cultura de transparencia y la asignación del gasto. VOX, por su parte, estima que el municipio necesita señales claras de responsabilidad y control, junto con un calendario de medidas concretas para reforzar los servicios públicos. En lo inmediato, la formación se alinea con los no adscritos para materializar el relevo y, a continuación, reclama una agenda de gobierno orientada a resultados y sometida a escrutinio ciudadano.
En definitiva, las razones de VOX para apoyar la moción se agrupan en cuatro vectores: transparencia, priorización del gasto en servicios básicos, cumplimiento de compromisos y recuperación de la confianza pública. Con sus palabras y denuncias, el grupo sitúa el foco en la necesidad de «cambio» y asume el coste político de un movimiento que, según afirman, responde a una demanda social acumulada y a su promesa de «poner la gestión al servicio de los ciudadanos».