El Presidente de la Organización Impulsora de Discapacitados, Dionisio González Otero, mantiene desde el pasado viernes 4 de Diciembre una huelga de hambre en su despacho de la sede central de la organización, en Talavera de la Reina (Toledo) como reacción ante el Día Internacional de la Discapacidad, del pasado 3 de diciembre y ante una campaña electoral donde los derechos de los discapacitados brillan por su ausencia, el presidente de la OID reclama la atención de todos los partidos políticos contra una Ley del Juego discriminatoria que sostiene, desde hace años, el monopolio del Estado y de la ONCE.
“Nunca habría querido llegar a esta situación, pero no me queda otra opción, tras las injusticias que se llevan cometiendo contra nuestro colectivo, que no ha hecho otra cosa que luchar por sus puestos de trabajo. Pero quien tiene el poder, no ha hecho nada hasta el momento. Hemos luchado y seguiremos luchando por esta causa. La OID somos todos y yo, como presidente, inicio una huelga de hambre para reivindicar un derecho que llevamos solicitando desde hace veintiséis años”, comenta Dionisio González
Igualdad entre discapacitados, la asignatura pendiente.
“Esta drástica decisión la tomé el pasado 3 de Diciembre, Día Internacional de las personas con discapacidad, al hacerse especialmente evidente que la Igualdad entre discapacitados en España sigue siendo una asignatura pendiente”, declara Dionisio González.
“Ha sido un año crítico para el colectivo de los casi 4.000 trabajadores de la OID y sus familias. La ONCE ha organizado una intensa campaña de desprestigio contra nosotros, intentando asimilarnos al “juego ilegal” llegando incluso su presidente, Sr. Carballeda, a atribuirse la representación única de los Discapacitados españoles ante SS. MM. los Reyes el pasado mes de Septiembre al afirmar “que a las personas con Discapacidad hay que darles una oportunidad digna de empleo”, refiriéndose solo a los afiliados de su organización.
La posición de la OID
Ante estas circunstancias, la OID inició hace tres meses un nuevo camino de diálogo dirigiéndose al Gobierno a través de la Dirección General de Ordenación del Juego, del Ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad; y de la Ministra de Empleo y Seguridad Social, sin que estos organismos hayan abierto diálogo alguno para normalizar la situación de los trabajadores de la OID, que han de acogerse a la figura del voluntariado para ejercer su labor y acceder a un medio de vida digno.
Asimismo, la OID se ha dirigido a todos los partidos políticos, a quienes ahora su Presidente en huelga de hambre quiere llamar la atención y solicitar un compromiso de reforma de la Ley actual del Juego, injusta y discriminatoria, y a la propia CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia), quién ya en su informe sobre esta ley manifestó que “debe garantizarse la no discriminación entre operadores” y que la reserva de la actividad del Juego (monopolio) a favor del Estado y de la ONCE por motivos de protección de salud pública, lucha contra el fraude fiscal y prevención de actividades delictivas, no está suficientemente justificada en el texto legal.
Tribunal de Justicia Europeo: último paso
La OID considera la Ley del Juego de 2011, no ajustada a derecho, y conculcatoria de varios artículos de la Constitución española. “Si los partidos políticos que nos gobiernen a partir del 20 de diciembre, siguen en la misma actitud que los Gobiernos anteriores, estamos dispuestos a llegar al Tribunal de Justicia Europeo, una vez agotadas las instancias judiciales en nuestro país“, afirma Dionisio González.
Preguntas sin respuesta que han motivado esta huelga de hambre
– ¿Por qué el Gobierno sostiene este monopolio de la ONCE, subvencionando además a esta organización?
– ¿Por qué el Ministerio de igualdad permite que se trate de una manera distinta a los invidentes españoles, frente a los más de cuatro millones discapacitados, permitiendo a los primeros una alternativa digna de trabajo y negándosela al resto del colectivo de discapacitados ?
– ¿Está mejor situado en España un invidente de la ONCE, que los demás tipos de discapacitados: físicos, psíquicos, sensoriales… ?
– ¿Por qué la ONCE despide o pone condiciones imposibles a sus trabajadores mientras vende sus boletos en gasolineras y estancos?
– ¿Por qué el Estado no deja realizar ventas benéficas a otros operadores y gasta en promocionar el boleto de la ONCE con cargo al bolsillo de todos los españoles?
SOBRE LA OID
Desde que, en 1989, la OID decidió poner en marcha su labor social, dirigida a la integración laboral, social, política, cultural y deportiva, ha generado empleo entre las personas con algún tipo de discapacidad que habían sido arrojadas al paro por la Organización Nacional de Ciegos Españoles, tras liquidar PRODIECU.
Esta labor social, la venta del Euroboleto, da trabajo veintiséis años después a casi cuatro mil personas en toda España pero el Gobierno Estatal, apoyando el monopolio de la ONCE, continúa denegando a la OID el título habilitante, lo que deja a sus vendedores discapacitados en una precariedad laboral y judicial inaceptable.