Hablamos con Felipe Fondón, Supervisor del laboratorio y el banco de sangre del Hospital Ntra. Sra. Del Prado y con Dolores Rivera, La Enfermera que cubre de tarde las salidas que se realizan a los pueblos de nuestra comarca.
«Llevamos más de 28 años moviéndonos por toda la comarca recolectando donaciones en los pueblos». Las donaciones han ido aumentando gracias a los medios de comunicación, publicidad y redes sociales, así que no nos podemos quejar. En los pueblos últimamente están muy animados, sobre todo gente joven, es muy bonito ver que familias completas vienen a donar. El centro de trasfusiones de Toledo es quien marca los pueblos según la demanda, salimos 5 veces al mes abarcando unos 25 – 27 pueblos de la comarca y les visitamos 2 veces al año. Un día avisamos e incluso mandamos cartas a nuestros donantes, así que en cada visita nos esperan, siempre hay gente nueva, pero también donantes muy fieles.
El centro de transfusiones está compuesto por Talavera, Toledo y Guadalajara, las unidades de sangre que recogemos las enviamos al Centro Regional de Transfusiones, allí hacen las diferentes pruebas oportunas para que esa sangre sea apta para para poder ser trasfundida. Cada ciudad solicita lo que realmente necesita. En la extracción se usa una bolsa y a parte se completan unos tubos para realizar analíticas, de este modo comprueban que la sangre cumple garantías, una vez terminado el día realizamos la entrega y llegan a Toledo, allí se realizan los test. Hay que procesar las donaciones para optimizar la sangre; quitar leucocitos, etc. De cada bolsa de sangre seleccionan plasma por un lado, por otro plaquetas y glóbulos rojos, se aprovecha absolutamente todo, con los tubos se hace una serología, detección de Hepatitis A, B y C, VIH, etc. Si todo se supera esta sangre será la que es solicitada cada mañana para tener un cierto stock en los centros.
Todos podemos necesitar sangre en cualquier momento y el paciente tiene que tener la absoluta tranquilidad de que la sangre que usamos ha pasado muchas pruebas exhaustivas, conocer que esa sangre no contiene ninguna enfermedad con total garantía. Toda la sangre que recibamos es bienvenida, cada vez hay quirófanos con más complejidad y allí la sangre es muy demandada, «en 30 años jamás hemos visto caducar una bolsa de sangre», cada bolsa tiene una validez de 45 días desde su extracción, incluso a veces hay que poner carteles por la urgencia de necesitar algún grupo sanguíneo determinado. Los grupos más solicitados son el “cero positivo (0+)» y «A Positivo (A+)», «el cero negativo (0-) es el llamado donante universal», este puede donar a todos, pero solo recibir de si mismo, para nosotros un cero negativo es muy socorrido porque en una trasfusión solicitado con urgencia vital podemos utilizarla sin hacer las pruebas cruzadas previamente porque tenemos la certeza casi absoluta de que no va haber ningún problema, pero este es un grupo escaso y poco corriente.
Debemos apoyar la donación, es un proceso sin riesgo, hay que pinchar pero no es doloroso, la primera vez algunas personas se marean, pero ya está, esto no tiene ningún peligro, previamente antes de la extracción viene un médico a los pueblos que realiza unas pruebas rutinarias, toma de tensión, hemoglobina… si hay un donante con tensión baja o que no da el peso adecuado no se le permite donar. «Una bolsa de sangre puede salvar 3 vidas», sino tuviéramos sangre para trasfundir muchas intervenciones no se podrían realizar, como en accidentes de tráfico, el donar sangre es tan importante que todavía no se ha podido clonar la sangre humana (y se ha intentado), así que solo es posible de esta manera.
