Uno de los votos más terroríficos que se hacían en la Edad Media era el de Tinieblas, que consistía en emparedarse voluntariamente para huir de los peligros y vanidades del mundo. Como es normal, las personas que hacían este voto morían en poco tiempo. Por varios documentos y testamentos se sabe que en la talaverana iglesia de El Salvador de los Caballeros hubo mujeres que se emparedaron voluntariamente, profesando así el aterrador voto de Tinieblas.