Barrio de Patrocinio

El barrio de Patrocinio de San José, llamado popularmente “Patro” por los talaveranos, nació el 19 de marzo de 1957, debido a la iniciativa del industrial don Patrocinio Martínez Flores, que bautizó a la nueva barriada como “Colonia de Patrocinio de San José” la cual, ubicada en el kilómetro uno de la carretera de Calera, estaba destinada a albergar a los trabajadores de Talavera.

El día de la inauguración, desde antes de la hora anunciada, los moradores del barrio, así como muchos hortelanos de la zona y también varios vecinos de Talavera, se echaron a la calle paseando de un lado a otro a la espera de que llegasen las autoridades. Además, en un templete adornado con gran profusión de hermosas colgaduras, estaba instalada una imagen de San José, patrón de la nueva colonia, dicha imagen era propiedad de la Hermandad del Patrocinio de San José, establecida en la iglesia de San Andrés, la cual había dado todo tipo de facilidades para su traslado.

A las cinco en punto de la tarde hicieron la entrada en la nueva barriada las autoridades de Talavera de la Reina, presididas por el alcalde, don Gregorio de los Ríos, y entre las que destacaban el Comisario de Policía, el capitán de aviación y abogado, don Rafael Pazos Blanco, y el Arcipreste, el cual bendijo a la colonia recordando a sus moradores que tenían por patrón a un santo. El alcalde felicitó a don Patrocinio Martínez por la inauguración del barrio y prometió la ayuda del Ayuntamiento para resolver los problemas que pudieran presentarse, dentro de las posibilidades económicas del mismo. Tras el acto se sirvió un vino español para los asistentes. Poco después se inauguró la piscina, que fue la primera piscina pública de Talavera y que estaba decorada con cerámica talaverana.

Esa piscina, que fue un agradable lugar de ocio, estuvo en funcionamiento hasta finales de los noventa, cuando fue demolida creándose una plaza en su lugar. Una curiosidad de este barrio es que sus calles llevan el nombre de santos, mientras que en el de Santa María las calles llevan el nombre de santas. Actualmente, a la entrada del barrio de Patrocinio de San José se encuentra, en el centro de una rotonda, el atifle, que llama poderosamente la atención de aquellos que pasan por allí.